Los loquios, ¿cómo deben ser?
Se llama loquios a la pérdida de sangre que se produce después del parto. Esta pérdida es muy variable en cada mujer, pudiendo llegar hasta la intensidad de una regla, y suele durar entre 10 o 15 días, yendo a menos cada día; pasados estos días, suele ser mucho menor y tiende a ser de un color más marrón, por la poca cantidad. No obstante, puede ser normal tener pérdidas de este tipo hasta el final del puerperio o cuarentena.
Debe recordarse que en caso de lactancia materna es muy posible que no aparezca una regla normal al final del puerperio, ya que dar el pecho se asocia a una situación hormonal especial que hace que sea muy habitual que no haya ciclo menstrual. Cualquier situación es posible, pero lo más habitual es no tener reglas, si bien en algunos casos se puede continuar con pequeños manchados incluso durante meses.
Los loquios no deben oler mal y su cantidad debe ir descendiendo a medida que avanzan los días; si en algún momento detectas que el olor es muy fuerte o tienes un sangrado abundante cuando ya estaba remitiendo debes acudir al hospital para asegurar que no hay ningún problema.
